EL NUEVO CORONAVIRUS: SÍNDROME RESPIRATORIO AGUDO GRAVE

Los coronavirus son una familia o grupo muy común de virus que afecta tanto humanos como animales, y que en las personas puede provocar diferentes enfermedades, desde un resfriado hasta un síndrome respiratorio grave (Neumonía con falla respiratoria).

El coronavirus lleva este nombre debido a que su aspecto es muy parecido al de un halo o una corona. Existen varios tipos de coronavirus humanos, que pueden causar simples resfríos, pero en los últimos años se han descrito 3 variedades zoonóticas, que han traspasado desde especies animales y han afectado al ser humano:

  • SARS-CoV: El coronavirus causante del síndrome respiratorio agudo y grave (SARS)comenzó en China en el 2003, y afectó a más de 8.000 personas. Su mortalidad estuvo alrededor de un 10%.

 

  • MERS-CoV: El coronavirus causante del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) se detectó en Arabia Saudita en el 2012, y afectó a más de 2.000 personas. Su letalidad fue de un 35%.

 

  • SARS-CoV-2: Durante diciembre de 2019 se registraron los primeros casos de infección respiratoria grave causados por este nuevo coronavirus en Wuhan, China, y desde esta fecha se han producido decenas de miles de casos.

Síntomas del SARS-CoV2
En general esta infección comienza con signos y síntomas parecidos a los de la Influenza como son: fiebre, tos y dolores musculares.
Afecta predominantemente a personas adultas, mayores de 40-50 años, en la mayor parte de los casos con enfermedades crónicas.

Causa

Lo que causa este síndrome respiratorio agudo grave es la nueva cepa de coronavirus, denominado SARS-CoV2. Hasta ahora, nunca había sido descrita en seres humanos, aunque causaba graves enfermedades en animales.

Este es un virus diferente al de la gripe porcina, siendo similar el mecanismo de traspaso inter-especie, ya que son virus zoonóticos que afectan a animales, mamíferos y aves, y que de vez en cuando traspasan las especies y afectan al ser humano.

Contagio y complicaciones

Una característica del SARS-CoV2 es la alta contagiosidad entre personas, mayor que el virus influenza y se transmite principalmente por gotitas de secreciones respiratorias, como, por ejemplo, al toser, estornudar, etc.

Los pacientes afectados han sido variables en evolución de cada caso, con un 20% que evoluciona con compromiso pulmonar en estado grave. Como es un virus nuevo, las personas no tienen inmunidad frente a él, y evoluciona con una clara gravedad mayor gravedad que los coronavirus humanos habituales de invierno.

Sin embargo, la mortalidad de este nuevo brote en China ha sido baja, alrededor de 200 casos y 6 fallecidos, en comparación con los brotes de SRAS y MERS, los que alcanzaron una mortalidad de un 15%.

Debido al nuevo contagio entre humanos, es un desafío para la salud pública y que las medidas de contención están siendo implementadas cada vez que se detectan este tipo de brotes, por ejemplo, mediante screening para los viajeros en los aeropuertos ubicados en zonas de contagio. Cabe destacar que la transmisión entre humanos es variable, ya que no está clara con la velocidad que se transmite y se encuentra en estudio.

Hasta ahora, la mortalidad de este nuevo brote en China ha sido relativamente baja, alrededor del 2%, en comparación con los brotes de SARS y MERS, los que alcanzaron una mortalidad de un 10-35%.

Prevención y tratamiento

La recomendación para las personas es no viajar a zonas geográficas afectadas por este nuevo virus, y en caso de viajes impostergables a dichas zonas, se recomienda evitar aglomeraciones, uso de mascarilla en los traslados y lavado de manos frecuente. Cabe señalar que actualmente no existe vacuna para esta enfermedad y que se están investigando tanto vacunas como medicamentos antivirales potencialmente efectivos.

 

 

Fuente CLC